Por desgracia este tema hay que contestualizarlo siempre.
Hablamos de una condición (que no opción) personal, que nadie elige, que no tiene "cura" pues no es enfermedad. Que durante unos cuantos (muchos) siglos ha sido, y es, perseguida tanto institucionalmente como por las religiones, sociedades y la propia familia.
En España, no hace tantos años, el maricón (los homosexuales no existían) era un ser raro, si pasabas de los 30 años y no estabas metido en un puticlub cada viernes, o estabas casado.... maricón.
Esta presión no era suficiente para que, los homosexuales, buscaran como expresar sus sentimientos. Buscar ese abrazo que les llenara como no lo hacían otros. En muchos casos desde un formato socialmente aceptado: matrimonio, sacerdocio u otros...
Y digo abrazo por que el sexo no deja de ser una continuidad de ese y otros gestos y sentimientos.
De ahí nacieron, por ejemplo, los cuartos oscuros. Fruto de la fuerte presión (no solo desprecios, sino prisión e incluso muerte) se buscan lugares y formas "rapidas" de llenar un vacío interior. Las prisas y la necesidad de anonimato hacen que los encuentros sean así, rápidos, esporádicos, el típico aquí te pillo aquí te mato, y en un anonimato tipo: si te he visto, no me acuerdo.
Todo ello creó una pauta, por la cual las relaciones homosexuales duraderas eran raras por desconocidas pues no se exteriorizaban.
Eso, un logro socio-religioso de varios siglos, nos trae ahora a donde estamos. Y vemos como, quienes han hecho todo lo posible por impedir estas relaciones, mantienen su ataque criticando lo que ellos han OBLIGADO a crear.
Si, en el ambiente homosexual hay mucha promiscuidad, puede que algún factor masculino (en su caso) contribuya a ello, pero la realidad es que esa cultura promiscua la ha creado la necesidad oprimida de personas con una sexualidad concreta.
Pocas relaciones homosexuales han sido avaladas por padres y amistades como para que se convierta en algo normal y bonito, como lo han sido las relaciones hetero.
Frases en bocas cercanas que dicen “lo prefiero antes muerto que maricón” por ejemplo resumen en pocas palabras tu camino a seguir respecto a esa persona... pero cuando lo escuchas decir a tus progenitores... en ciertas edades....
Hará falta una, quizá dos, generaciones para que realmente sean normales las relaciones entre personas distintas a las que estereotipan religiones o afines.
Un beso a tod@s.